Para el pueblo de Ceuti, hoy ha sido fiesta, pero fiesta grande. El pueblo ha lucido sus mejores galas para recibir a la Hospitalidad Diocesana en la última convivencia de este curso, que a su vez marca el inicio de la cuenta atrás para la Peregrinación.
Desde primera hora, con los desayunos, los voluntarios de la Delegación lo han dado todo por los asistentes, Enfermos y Hospitalarios. El día ha acompañado, veraniego más que primaveral, y hemos podido disfrutar al aire libre en el Parque Juan Carlos I del pueblo.
Tras los desayunos, turno para las presentaciones y acogidas: la Delegada de la Hospitalidad en el pueblo, Antonia López, ha abierto el turno, deshaciéndose en elogios a la ayuda prestada por todas las fuerzas vivas del pueblo: Corporación Local, Comercios, vecinos y Voluntarios de la Hospitalidad, sin olvidarse de una manera cariñosa del apoyo del Presidente Diocesano, D. Joaquín Martínez, quien personalmente animó y creyó desde el principio que «la pequeña Delegación haría una Gran Convivencia».
Turno para el Alcalde, D. Juan Felipe Cano, que ha dado la bienvenida a todos los asistentes, abriendo las puertas del pueblo a la Hospitalidad Diocesana y ha agradecido la presencia de concejales de la corporación, así como a otros grupos políticos, un gesto que no nos ha pasado por alto y que en estos tiempos tan convulsos, agradecemos enormemente. El voluntariado y la solidaridad deben estar siempre por encima, a la altura de la dignidad de las personas.
Turno para Doña Violante Tomás, Consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Comunidad, que se ha mostrado feliz de ver este ejemplo de voluntariado, recordando a Santa Teresa, «Quien no vive para servir, no sirve para vivir».
Con la intervención de D. Joaquín Martínez, Presidente Diocesano, se ha cerrado el turno de intervenciones oficiales. Joaquín, además de agradecer el esfuerzo de la Delegación, ha aprovechado para recordar que ya estamos en puertas de la apertura de inscripciones y que debemos animar a nuestro entorno, amigos, etc… a vivir la experiencia de Lourdes.
Con el Ángelus, dirigido por el Consiliario de la Hospitalidad, D. Luis Emilio Pascual, ha comenzado la Procesión a la Parroquia de Santa María Magdalena, donde se ha celebrado la Eucaristía, presidida por el mismo. En su homilía, como siempre ingeniosa y espontánea para que el mensaje cale en la asamblea congregada, nos ha recordado la importancia de poner el «tú» antes que el «yo».
De vuelta al punto de partida, comida compartida y acompañamiento musical por parte de Azucena Illán, que ha animado a los asistentes con canciones que han sido seguidas por los asistentes.
Finalizado todo lo programado para el día de hoy, retorno de todos a sus localidades.
Agradecemos a todos y cada uno de los miembros de la Delegación por el esfuerzo realizado durante el día de hoy. La Virgen os lo recompensará.
Y… ahora sí, cuenta atrás para la Peregrinación Diocesana, quedan sólo dos meses para estar en Lourdes.