Elvira es delegada en Cartagena y responsable de Salas de Mujeres. Lleva muchos años peregrinando a Lourdes. Hoy nos deja unas palabras sobre cómo ha vivido la L Peregrinación Diocesana a Lourdes. ¡Gracias!
Son muchas las emociones y alegrías vividas y sentidas en mi corazón. No sé… Ha sido una peregrinación llena de nuevas experiencias: en mi servicio junto a mis compañeras; con los enfermos que me han hecho ver en sus caras a Jesús; en el dolor, pero con unos ojos llenos de alegría, de esperanza, de lucha, de amor.
He visto mi pequeñez, mis miserias… ¿Qué podría decir? El corazón está lleno de alegría. Ha sido especial en todos los actos: en la unción de enfermos; en la misa en la Gruta, La Señora me miraba “como una persona mira a otra persona”; y en todo momento, Ella me ha llevado de la mano y también mi madre, que me enseñó y me dejó esta gran familia, la Hospitalidad.
Gracias a la junta, a cada uno de ellos por su cariño y apoyo en todo momento durante todos los días del año. Es mucho lo que tengo en el corazón y en mi ser. Sólo puedo decir: gracias Madre de Lourdes, gracias mamá, os quiero…