Hola Hospitalarios:
Recuperamos el pulso a la Hospitalidad, recordándoos que el próximo Lunes día 11 de Marzo, tenemos la Misa mensual en la Sede de la Hospitalidad. Recordaremos a dos miembros de la Delegación de Alcantarilla, como son Asunción Herrero Hernández (Hospitalaria) y Antonia Muñoz García (Enferma), y también recordaremos de una manera muy especial a D. David.
la Misa es el Lunes día 11 de Marzo, a las 19h00 en la Sede de la Hospitalidad
Están siendo días de vacío, en los que la memoria comienza a funcionar y a recordar múltiples recuerdos y anécdotas vividas con D. David. A ningún hospitalario se nos escapa haber tenido alguna con él. Ese tono inconfundible en el habla, arrastrándola ahí donde quería enfatizar y llamar nuestra atención: «Esa Madre…» le gustaba decir «…que sufre a los pies de su hijo ¡JESÚS!» o «Ese enfermo… que se pone delante de la Gruta… ¡PARA DAR GRACIAS POR SU ENFERMEDAD!». Como dice María Pura en un comentario en la noticia de su fallecimiento: «A veces decíamos que era pesado en sus homilías pero es que las vivía. Todo lo que nos ha podido decir ha sido orado ante el Señor». Quien le ha querido conocer, ha traspasado y escuchado sus palabras y ha encontrado a D. David en la máxima expresión del Hospitalario: Amaba como nadie a su Hospitalidad, Daba todo lo que podía a los demás, Servía fielmente a su Iglesia por encima de todas las cosas… y se Olvidaba de sí mismo para entregarse a los demás, sin esperar nada a cambio.
Con un estilo inconfundible: gafas oscuras, jersey gris, bufanda a juego y siempre con sus libros y su apretada agenda en la mano. Los dulces, sin azúcar, y las gracias, a Dios. Y si encontraba un chófer para acercarle a casa o a los Pasos de Santiago, ya todo era perfecto. Pedirle una fecha libre para un retiro espiritual era casi misión imposible, pero a los cinco segundos ya tenía la solución: todo encajaba y todo era posible. No vamos a descubrir hoy a D. David, ni vamos a repasar todos sus méritos, pues todos sabemos que no era amante de estar en primera fila, pero sí de preocuparse desde la segunda de que todo estuviera en orden.
Pronto estaremos en Lourdes con la Peregrinación, y debemos vivirla como él nos ha enseñado durante más de 30 años. Desde Noviembre de 1982, cuando fue nombrado Consiliario de la Hospitalidad de Murcia se declaró enamorado de Lourdes. Rescatando una publicación de «El Peregrino», del primer día de la XV Peregrinación, del año 1983, entrevistaban a D. David y nos decía, a la pregunta de qué le parecía el «Tren de la Esperanza»:
No es hablar por hablar ni responder con la frase que pienso que se espera de mí. Es que realmente esto es maravilloso. Aquí se palpa la Fe de todo, la esperanza especialmente la de los enfermos, el espíritu de servicio, el ansia de hacer algo por lo demás… es impresionante».
Pero si bien hemos comenzado diciendo que son días de vacío, debemos enseguida transformarlo en días de júbilo y agradecimiento, pues ya se encuentra junto al Padre, preparándose para observar desde arriba cómo comenzamos a preparar todos la próxima Peregrinación. Pero no las maletas o las inscripciones, sino los corazones.
El Lunes, la Capilla de la Sede seguro que va a estar llena de amigos hospitalarios. El pasado día 11 de Febrero, para la Misa de ese día llegó pronto para prepararlo todo pues venía el Sr. Obispo a oficiar, y se encontró con todo listo y preparado por su persona de confianza para estos menesteres. El altar lucía precioso: lleno de flores, con la Virgen más iluminada que nunca. A los que en ese momento estábamos allí y terminábamos de colocar las sillas, nos dijo: «Todo esto, ¿no será porque viene el Obispo? A ver si para la del mes que viene me lo preparáis todo igual de bien». Rápida fue la respuesta en ese momento: «D. David, estará igual, como siempre hacemos». Y ahora te volvemos a decir: «D. David, tu Capilla estará igual, como siempre».
Gloria al Señor