Tras quedar vacante el puesto de Consiliario de la Hospitalidad por el fallecimiento de nuestro querido y añorado David Gascón el pasado día 4 de marzo, finalmente, hoy día 9 de Abril de 2013, tras escuchar el parecer de la Junta Directiva, nuestro Obispo José Manuel Lorca Planes ha procedido a nombrar al nuevo Consiliario Diocesano de la Hospitalidad. Dicha responsabilidad ha recaído en Luis Emilio Pascual Molina. Es pues un día de alegría y de acción de gracias para todos los hospitalarios pues de Luis se pueden decir muchas cosas pero entre ellas destaca ser un sacerdote enamorado de Lourdes y de la Hospitalidad.
Luis Emilio es un sacerdote conocido y querido por todos en nuestra Hospitalidad, pero ello no es óbice para que, con unas pinceladas biográficas, conozcamos un poco más al que ya es nuestro Consiliario:
Luis Emilio nace en Yecla el 15 de Agosto, festividad de la Asunción de la Virgen, del año 1958, cuando en Lourdes se conmemoraba el Centenario de las Apariciones.
Finalizados sus estudios universitarios como licenciado en Ciencias Químicas, inicia su formación militar alcanzando el grado de Teniente. Pero si hay un hito reseñable en la vida de Luis es el momento en el que reconoce la llamada del Señor y respondiendo un sí generoso inicia su formación en el Seminario Diocesano que se verá culminada con su Ordenación Sacerdotal el 25 de Julio de 1990 en su ciudad natal.
Su primer destino como sacerdote recién ordenado iba a ser la Parroquia de Ntra. Sra. de la Asunción de Alcantarilla. Allí llegó con todo el entusiasmo de un sacerdote recién ungido para llevar a todos la alegría del Evangelio. Si bien en Alcantarilla le esperaba un regalo del Señor totalmente inesperado. Sin saber cómo y gracias a la labor y valentía de la entonces delegada de la Hospitalidad en dicha localidad, Luis Emilio se vio con un billete para montarse en el Tren de la Esperanza y vivir la experiencia de una Peregrinación a Lourdes. Y se montó en el tren y el Señor, por manos de María, le volvió a salir al encuentro en ese “trocito de Cielo”. Era Junio de 1991, desde entonces no ha faltado ningún año al encuentro con María en la Peregrinación Diocesana.
En 1992 realiza su primer Stage al servicio de la Hospitalité Notre Dame de Lourdes y en 1994 lo realiza por partida doble al engancharse al Stage de Jóvenes, grupo del que queda sigue formando parte, pues desde entonces no ha habido un solo año que no haya participado de esta experiencia maravillosa de la acogida y del servicio a los hermanos de toda lengua y nación.
Tras dos años intensos de formación, en 1995 culmina su licenciatura en Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma.
A su vuelta a Murcia es destinado a la Parroquia de Ntra. Sra. del Rosario de Santomera, localidad en la que Luis realiza una gran labor pastoral. Tras cinco años de gran actividad en dicho municipio es destinado a la Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús de Molina de Segura donde permanece dos años. Durante estos años es nombrado Viceconsiliario Diocesano de la Hospitalidad con una especial misión para con los jóvenes y niños.
Desde hace años y hasta la actualidad desempeña la labor de Delegado Episcopal de Cáritas Diocesana, consiliario diocesano de Manos Unidas, Capellán Mayor y profesor de la Universidad Católica San Antonio (donde fomenta y coordina la experiencia de Lourdes entre los universitarios mediante una peregrinación bianual), Director y profesor del Instituto Superior de Ciencias Religiosas a distancia San Dámaso, Rector de la Iglesia de Jesús y Capellán de la cofradía del mismo título.
Si bien, durante todos estos años y pese al dinamismo propio de la actividad formativa, profesional y ante todo pastoral hay un elemento que permanece firme y marcado en rojo en la apretada agenda de Luis Emilio: la Peregrinación a Lourdes de Junio, el Stage de Septiembre y la cantidad de actividades y convivencias de la Hospitalidad Diocesana.
Es por ello que hoy la Hospitalidad Diocesana de Nuestra Señora de Lourdes, donde Luis se siente en familia, está de enhorabuena y da gracias a Dios por su nombramiento.
Que Nuestra Señora de Lourdes le conceda del Señor la gracia para servir con verdadero entusiasmo y espíritu hospitalario a la Iglesia en esta hermosa realidad diocesana que es la Hospitalidad de Ntra. Sra. de Lourdes.